CASALEXO nos pidió algún elemento decorativo y se ve que teníamos ganas de complicarnos la vida. Quisimos hacer un modesto homenaje al genial pintor Luís Seoane, y para ello se nos ocurrieron tres cosas:
1) añadir algún elemento de restaurante o bar a cuadros de Seoane;
2) o bien interpretar algún cuadro con detalles de restaurante cómo creíamos que lo haría Seoane;
3) o finalmente tomar algún cuadro famoso y «seoanizarlo» y «restaurantizarlo».
Una «pequeña locura», pero lo hemos pasado bárbaro, este es un ejemplo:
Para ver el resto (y disfrutar de buena bebida y mejor comida) tendréis que pasar por Casalexo, en la calle Pardo Bajo… no os arrepentiréis.